jueves, 23 de octubre de 2008

En Toledo no se cumplen las sentencias judiciales

Nunca me han puesto ninguna multa. Pero desde luego que, a partir de ahora, si me la pone la Policía Local no pienso pagarla. Prefiero “dialogar”.
¿Por qué digo esto? Resulta que existen dos sentencias firmes en Toledo por cuestiones urbanísticas que mandan la demolición del exceso de volumetrías de dos inmuebles. Vamos, que tanto el Centro de Formación de Fedeto en el paseo de la Rosa, como el Cigarral de Caravantes tienen construidos más metros de lo que deberían. En su día, Consejería de Cultura y Ayuntamiento, respectivamente, lo denunciaron. Y en su día el Tribunal Supremo y el Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, también respectivamente, concluyeron que las construcciones se habían excedido y que se debía demoler lo ilegal.
Años después (la sentencia del Supremo de Fedeto es de 2000, pero la primera del Superior de Justicia, del 93), Iniciativa Ciudadana exige que se ejecuten estas sentencias.
¿Cuál es la respuesta del Ayuntamiento? Preguntados por la cuestión en una rueda de prensa conjunta sobre urbanismo, PSOE y PP han apostado por el diálogo y por llegar en breves fechas a un acuerdo. Aunque existen sentencias firmes, “no se trata de tirar por tirar”.
Caso curioso es el del Hotel-Cigarral de Caravantes. Me gustaría saber quién es su dueño y qué le debe el Ayuntamiento. Según ha manifestado Iniciativa, es el propio Consistorio el que tiene la obligación de ejecutar la sentencia. El pasado lunes, cuando el edil de Urbanismo conoció la noticia, se mostró sorprendido, y afirmó que no conocía la situación, pero que el Ayuntamiento haría lo que tuviera que hacer. Un día después, se descuelga junto a su antecesora ‘popular’ con lo del diálogo. Y no sólo eso, llegaron a anunciar que van a buscar una solución para dar licencia al establecimiento. La excusa es que se trata de una actividad económica y de puestos de trabajo. Bueno, también lo es la Cosa Nostra, y hasta ella cumple las sentencias judiciales.